Kimi Räikkönen termina quinto en una carrera decepcionante para el equipo Ferrari. A pesar de haber logrado un resultado mejor que su compañero de equipo, Sebastian Vettel, el finlandés se ha visto superado no sólo por Mercedes sino también por Red Bull.
El Gran Premio de Silverstone arrancó con una buena noticia para Räikkönen, después de que la Scuderia anunciara su renovación; no obstante, no continuó de la misma manera debido a los problemas de agarre y fiabilidad que tanto él como Vettel han tenido a lo largo de los últimos tres días.
"No, fue lo mismo que ayer [el problema en los reglajes]. Todo el fin de semana fue complicado y creo que al final lo hicimos lo mejor que pudimos. Simplemente nos faltó carga aerodinamica y en un circuito como éste con estas condiciones no es nada fácil. Necesitas carga aerodinámica para ir rápido aquí, y nos perjudicó mucho eso. Es defenitivamente lo que necesitamos para desafiar a los Mercedes. Obviamente, tenemos que mejorar en todas las áreas, pero si pudiéramos tener la carga aerodinámica de los coches de delante sería otra historia".
El agua que cubrió el asfalto inglés minutos antes de que arrancara la carrera obligó a los monoplazas a tomar la salida con el coche de seguridad en pista. Pese a las quejas de algunos pilotos, el finlandés aprueba la decisión tomada por dirección de carrera y reconoce que en algunos sectores era difícil pilotar. "Fue fácil después, pero la visibilidad al inicio era escasa.Creo que fue la decisión correcta porque había mucha agua estancada en la curva 1, así que creo que fue lo correcto por las condiciones difíciles".
El campeón del mundo en 2007 no se conforma con terminar segundos en el mundial de constructores y pide más con el objetivo de hacer frente a las dos flechas de plata. "No creo que lo correcto sea salir y defender (la segunda posición del mundial), porque debemos mejorar y aspirar a superar a los Mercedes, pero claro que los Red Bull aquí fuerón mejor que nosotros", concluye. LaF1.es
