
"Su relación es como un volcán que está a punto de entrar en erupción entre los dos", dijo Wolff en declaraciones recogidas por The Sun. "Ahora, todo está en juego. Su relación ha cambiado desde 2013 donde se les dio las mismas oportunidades y luego de nuevo en 2014 cuando podían ganar carreras y el campeonato", comentó.
"Los dos tienen personalidades muy diferentes. Ambos se han desarrollaron individualmente y como pilotos de equipo. La forma en la que les he visto en los últimos dos meses y realmente tranquila. Pero en los momentos en que han chocado, fue muy difícil de llevar entre ellos y para el equipo", aseguró el jefe de los de Brackley.
"En el último par de carreras hemos tenido un ambiente tranquilo. Ellos han ayudado a mantener el equipo unido y el espíritu alto. Aunque tenemos que reconocer que ahora todo está en juego. Se trata de ganar y perder el campeonato Mundial de pilotos. No pueden estar enamorados el uno del otro este fin de semana", asegura.
El Mundial 2016 llega a su fin, y tan solo queda un asalto. El trazado de Yas Marina verá coronarse a Nico Rosberg por primera vez como Campeón del Mundo, o bien a Lewis Hamilton que sumaría su cuarto título. La tensión ya se palpa en el equipo Mercedes. SoyMotor.com