

Vestido con la indumentaria roja de la escudería italiana, el niño fue enfocado por las cámaras de la realización televisiva poco después de que el Ferrari del finlandés se quedara en la escapatoria del trazado de Montmeló tras tocarse con Verstappen.
Los lloros del joven aficionado de Ferrari acabaron en un sueño y una hora y cuarto después del incidente, las cámaras mostraban al otro protagonista del GP de España charlando con Raikkonen en el cuartel general de Ferrari que está instalado en el 'paddock' de Montmeló.
De la decepción más profunda a hacerse una foto junto a su ídolo en menos de dos horas, una muestra de que algo está cambiando en el circo de la Fórmula 1 desde el cambio de propietarios.

"Bajo el mando de Bernie Ecclestone, la Fórmula 1 era un negocio que decía no a todo. Ahora queremos decir sí a muchas más cosas", explicaba hace unas semanas el nuevo presidente de la F1, Chase Carey.
Mientras la compañía estadounidense encuentra la fórmula mágica para mejorar el espectáculo en la pista, gestos como el de hoy entre Raikkonen y el joven aficionado de Ferrari parecen demostrar que alguna cosa se está moviendo en el seno de la F1. EFE 14 Mayo 2017 15:55