domingo, 7 de junio de 2015

Triunfo de Hamilton, remontada de Vettel y abandonos de McLaren

El circuito Gilles Villeneuve de Canadá es un trazado que honra a quien lleva su nombre y que gusta a muchos por las carreras tan entretenidas que suele dejar en nuestras pantallas. Y decimos 'suele', porque la de este año ha sabido a muy poco. Al coche de seguridad, al que también le gusta mucho esta pista, no se le vio, las batallas fueron contadas y los abandonos escasos y previsibles. Como previsible fue ver al hombre que alzó el trofeo de campeón.

Lewis Hamilton, quién sino. No podía ser de otra manera. Cuando las cosas suceden con la normalidad que vimos en la isla de Notre Dame poco se puede hacer hoy en día para evitar que el británico alce los brazos en los más alto del podio. Ni tan si quiera quien lleva el mismo coche, pudo evitarlo. Sí, es cierto que Rosberg no perdió en ningún momento la estela de su compañero, pero nunca llegó a ser una amenaza para su victoria.

El británico salvó el momento más delicado, la salida que acaba en un peligroso embotellamiento en la primera curva. Y, a partir de entonces, solo tuvo que dedicarse a gestionar un margen de distancia con el alemán que por momentos llegó a reducirse a la zona de DRS. Pero cuando Lewis veía que Nico se acercaba demasiado, apretaba y volvía a ampliar su colchón. Así, cruzó la meta con 2.2 segundos de renta para lograr su cuarto triunfo.

Algo más de misterio encontramos en lo que sucedió a espaldas de las inalcanzables flechas de plata. El último puesto del podio estuvo protagonizado por una lucha entre finlandeses que se saldó con la particular victoria de Bottas (que llegó a 40 segundos de los Mercedes). El piloto de Williams se aprovechó de un trompo de Räikkönen en la horquilla tras su primera parada para asegurarse el tercer peldaño del cajón. Su primer podio del año.

Después de su error, Kimi no pudo intentar recuperar el puesto en el que había empezado porque tuvo que pasar una segunda vez por boxes. Mucho más atrás que 'Iceman' salió Vettel, en la 18ª posición, pero logró terminar a solo cuatro segundos del otro Ferrari en la quinta con una estrategia de dos paradas. Una remontada sobresaliente que dejó algunas de las imágenes del GP con un correoso Alonso y un valiente Hülkenberg, que trompeó al defenderse.

Si la escalada de Sebastian en la parrilla fue digna de destacar, no lo es menos la de Massa con el FW37. Nada menos que nueve plazas ganadas, desde el 15º puesto al sexto. Además, el brasileño también puso una buena ración de salsa a la insulsa carrera con una pasada al límite con Ericsson en la segunda curva. Ambos rodaron en paralelo dejándose centímetros de distancia, incluso se tocaron un poco, brindándonos una maniobra de infarto.

Para que le dé un infarto, de alegría, seguro que acabó Maldonado. Después de abandonar en cinco de las seis anteriores carreras, vio la meta y se llevó sus primeros puntos. Quien le haya estado maldiciendo habrá perdido ya su muñeco de vudú, veremos por cuánto tiempo… Las tres posiciones restantes con derecho a puntos fueron para Hülkenberg, Kvyat (primer motor Renault) y Grosjean, que perdió puestos por tocarse con Stevens en una absurda maniobra.

Hasta la 12ª plaza hay que bajar para encontrar al primer español: Sainz, el de siempre. Carlos cedió dos posiciones al luchar con Alonso en la salida, pero se rehízo al final y pudo superar a Ricciardo con el 'hermano mayor' del Toro Rosso. Todo un logro si lo comparamos con el resultado final de Fernando: abandono, el tercero seguido, el cuarto del año. Hasta que llegó, en la vuelta 47, solo pudo ver cómo era adelantado sin piedad y negarse a ahorrar gasolina.

Misma suerte con el MP4-30 corrió Button diez giros más tarde. Problemas de fiabilidad en Woking tras gastar dos 'tokens' para intentar olvidarse de ella. Dicen que el fallo estuvo en los escapes, ya da igual donde sea, al McLaren le salen los males por los cuatro costados. El tercer y último abandono lo protagonizó Merhi con el Manor, el primero de su carrera en la F1. Esto nos dejó el viejo Gilles. El año que viene, seguro que más, y esperemos que mejor.

Ref LaF1.es