- El finlandés dejó pasar a su compañero cuando iba líder de la carrera
Uno de los momentos que más recordado será del Gran Premio de Alemania F1 2018 lo ha protagonizado Kimi Räikkönen, cuando ha dejado pasar a su compañero de equipo, Sebastian Vettel, al cumplir con las órdenes de equipo. El finés, que partía tercero, ha terminado en la misma posición, por detrás del Mercedes de Valtteri Bottas.
La estrategia de carrera de Kimi Räikkönen era diferente a la de Sebastian Vettel y eso quedó muy presente a lo largo de toda la prueba. El piloto finés fue el primero de la parrilla en entrar en boxes, en la vuelta 15, y montar neumáticos blandos.
Diez vueltas más tarde llegó el turno de Vettel, que también entró para montar el mismo compuesto. En ese momento, el alemán se incorporó a pista justo por detrás de Kimi. Este hecho hizo que la Scuderia se planteara invertir las posiciones, planteándole al finés que dejara pasar a su compañero y sin titubeos, Räikkönen accedió.
"Sí, acepto las normas. Tenía la velocidad y durante un momento de la carrera creí que iba a ir a dos paradas y realmente es lo que ha sucedido. Ha cambiado mucho el final de la carrera. Ha habido mucho con lo que lidiar, incluida la lluvia y las condiciones resbaladizas", comentó tras la carrera.
"Luego, también, uno de los doblados, uno de los Sauber estaba en el medio. No ha sido una carrera fácil. Estoy contento por haber terminado, pero no del todo", ha comentado el finés.
El finés reconoce que no ha sido una carrera fácil debido, especialmente, a las zonas del circuito que estaban más mojadas, frente a otras que estaban secas. Pese a todo, ha concluido tercero frente a su compañero, que no ha podido terminar tras sufrir un accidente en la Curva 13 del circuito.
"No sé como iban los Mercedes. Yo he pilotado el Ferrari y ha sido muy difícil con esa cantidad de lluvia. Era muy difícil saber en qué lugares estaba el agarre sin tener a nadie al lado", ha apuntado para finalizar. Räikkönen
